martes, 9 de enero de 2018

Haut-de-Cagnes, refugio de artistas y famosos

La casualidad ha querido que pase una noche en Haut-de-Cagnes, un fabuloso pueblo en los Alpes Marítimos franceses, en el que domina el Castillo Grimaldi, las calles sinuosas y placetas de postal sobre una colina que ofrece unas vistas fabulosas a la luminosa Côte d’Azur.

Nos hospedamos en el Château Le Cagnard, un edificio de piedra del siglo XIII, refugio de artistas como Chagall y de famosos como los Beatles, Robert de Niro y otros que aprovechan las tantas manifestaciones artísticas que se organizan en la zona de Cannes y Niza.

Esta zona, en la que dominan tantas poblaciones turísticas de playas infinitas y edificios-ciudades, siempre me sorprende cuando descubro que en su interior, a tan solo diez o quince kilómetros tierra adentro, hay joyas como Haut-de-Cagnes, Mougins, Saint-Paul-de-Vence y tantas otras que me quedan por visitar. Son pequeñas poblaciones en colinas donde el tráfico no llega, donde los artistas han podido y pueden inspirarse observando esos atardeceres provenzales y en los que apreciar la tranquilidad. No me extraña que Picasso, Renoir, Chagall y tantos otros…

Haut-de-Cagnes, conocida como la Montmatre de la Côte d’Azur, sorprende por el imponente castillo Grimaldi, que alberga un museo de historia y otro dedicado al olivo y su importancia en la zona. El resto de la villa, callejuelas que albergan galerías, algunas tiendas y casas de piedra con ventanales de colores muy propias de toda la Provenza.

 Una breve parada que repetiré en primavera para poder disfrutar de aquellos atardeceres que Renoir inmortalizó.